Cero a cero, el resultado perfecto según el Doctor.


Por Gabriel López

Recuerdo la imagen adolescente de Julieta, la hija de Alberto Santilli (El Pelado de “Los de Siempre”), que se asustó de la bronca de los Leprosos que rodearon en la visitante a un grupo de hinchas albirrojos. Se le estaba empatando a los del Loco Bielsa que iban directo al título, años 92/93. “Te juro que si papá no me levantaba en brazos esos cobardes le pegaban”, tiene patente la hoy mujer que vas camino a los 40.
Empate de sábado, otro resultado más que divide honores saliendo de casa. Pero atenti a lo que arrojan los dados: de los últimos 11 partidos sólo trastabilló uno. Con esa incorporación a la que ya le rinden devoción, “San Javier” (permítase que se bautice así al santafesino, en honor a otro campeón del mundo que fue santafesino: Carlos Monzón). Masche la da redondita: en el primer tiempo, de 25 pases que hizo, 22 correctos y 3 sin precisión).
Ah. El Vikingo Shunke fue otro puntal… y si no termina con sangre no vale. Es el fútbol actual, de tanto choque y muchísima velocidad ¡si hasta parece una carrera de TC donde está el número de chasis (perdón, de camiseta) número 43 del jugador Moreno.
Podían haber jugado sin arcos, pero en intensidad y en táctica fue muy rico. Lástima que no se pudo contar ya con Marcos Rojo, ya que se hubieran visto en cancha 3 subcampeones mundiales de Brasil 2014: Maxi Rodríguez corrió como uno de veinte y en el final le hizo un juramento al árbitro: “fue penal, fue penal, le juro que fue penal”.
Y el pincharrata que anda por todas partes orgulloso de estadio y camiseta nueva también puede sentirse a gusto con el empate 0 a 0, como diría Bilardo… “el resultado perfecto”. Pensar que hace 15 años El Narigón dejó para siempre de ser DT tras una igualdad sin goles en este Parque Independencia.
¡Hasta el lunes en UNO! Esa localía que en esta Superliga tiene a Estudiantes segundo en la tabla cuando recibe a los rivales, con los mismos 20 puntos que Newell’s.