Lo mejor del triunfo 1-0 en el Regional - Superliga 2018/19
Notas: Sofía Mogaburu - Cámara: Osky Rómulo
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El clásico resultado.
Domingo 10, la fecha que Superliga había definido para el cruce entre los equipos platenses, esta vez en el Estadio Ciudad de La Plata y a las 17.10, quizás el último regional a disputarse en ese escenario, con la esperanza de volver a casa. Es verdad que Estudiantes no venía de la mejor manera, derrotas seguidas ante Argentinos Jrs, Talleres y Racing, seguido por la renuncia de un estandarte de nuestra escuela, Leandro “el Chino” Benitez.
En la semana previa ya se sentía un partido cargado de emociones, pero como en su momento dijo Simeone, “los clásicos se ganan”. El miércoles asomó un chico categoría 99 al colegio, nacido en General Roca y apadrinado por Cacho Malbernat. Facundo Mura, hablando sobre el compromiso, la regularidad y el trabajo que hay que hacer para convertirse en profesional, una charla para los chicos de inferiores, que ni imaginarían, ni ellos ni el protagonista, que en cuestión de días, el jóven lateral por derecha debutaría profesionalmente en la banda opuesta a su habitual y en un partido de estas magnitudes.
Fue el sábado el prólogo del partido, el choque de la reserva del Chavo Desábato, en el cual el Pincha arrancó perdiendo, y a los 30 del complemento se quedaba con uno menos por la doble amarilla a Rodríguez. Sin embargo, y aunque todo se ponía cuesta arriba, el León mostró la impronta que señala su historia, y con la aparición de Di Pizio a los 91 y de Vera a los 93, igualaba en tan solo 180 segundos, un partido clave y con un jugador menos. Llegó el tan esperado domingo. “Los clásicos se juegan con la cabeza de un profesional y el corazón de un hincha” declaró el glorioso Chavo que algo sabe de esto de ganar regionales.
Se acercaba la hora, el Estadio Ciudad de La Plata se empezó a vestir de rojo y blanco, desde temprano. Largas colas que dispuso la policía apelando a la paciencia de la familia pincharrata que no reaccionó en ningún momento, incluso ante la búsqueda por parte de los organismos de seguridad, de no dejar ingresar ningún número 7, ya sea en banderas o en camisetas, para evitar que se haga referencia a la mayor goleada en la historia de los clásicos.
Cuarenta mil almas se juntaron para que a las 17.10 de inicio un nuevo partido de Estudiantes, todos diciendo presente en el momento que más lo necesitaba el León, el plantel, nuestra familia. Con Pablo Quatrocchi como interino, el Pincha comenzó firme en los primeros minutos, sin incomodar a Andújar en los primeros compaces.
El punto de inflexión se dio a los 28 minutos de juego, cuando un planchazo de Faravelli a la Gata Fernández, dejó a la visita con 10 jugadores. A partir de eso, el León tomó la lanza y fue el protagonista del partido, sin poder capitalizar recién hasta los 43 minutos, cuando un quirúrjico centro de Gastón Fernández acarició la cabeza de Albertengo e hizo delirar al pueblo Pincharrata que ponía el 1-0 que se mantendría hasta el final. Ya en el complemento, los cambios en la visita no alteraron el dominio de Estudiantes, mientras que Lattanzio y Juani Díaz le dieron frescura a Quatrocchi, mientras que Retegui, que entró por Pavone vio la roja dos minutos después de su ingreso.
A las 19.05, el Estadio era una fiesta, jugadores abrazándose, Andújar y Sappa saltando agitando una bandera, la Gata con su hijo en andas y desparramando risas, y 40.000 pinchas delirando con un triunfo, que ya parece habitual.
Se fue un nuevo regional, con un DT interino en el banco que agarró el buzo y estuvo a la altura de quienes lo vistieron, con jugadores que comprendieron que debían jugarlo a lo Estudiantes, con toda la familia Pincha sabiendo que había que estar, que se necesitaba imperiosamente su presencia, que a la historia se la acompaña.
Estudiantes se quedó con el regional, y ya parece una oración repetida, por el trabajo, por la seriedad y por el compromiso, dándole a la gente, a su gente, una de las alegrías más grandes del semestre, y demostrando que el Pincha, juegue donde juegue, siempre va a salir a respetar su historia.